NOS HONRAMOS SIENDO PUNTUALES

Fotografía: chuttersnap en Unsplash.

Fotografía: chuttersnap en Unsplash.

Por Gudrun.

Cuando hablamos de puntualidad hablamos de un tema de orgullo, de cultura o de un tema incómodo. De una u otra forma es parte de nuestro día a día. ¿Qué tiene la puntualidad que la hace tan ambigua? ¿Qué hace este concepto en un artículo para estudiantes, para artistas, para animadores?

La Real Academia Española nos ofrece la siguiente definición:

 

Puntualidad

1. f. Cuidado y diligencia en llegar a un lugar o partir de él a la hora convenida.

2. f. Cuidado y diligencia en hacer las cosas a su

debido tiempo.

3. f. Certidumbre y conveniencia precisa de las 

cosas, para el fin a que se destinan.

 
 

De acuerdo al etnógrafo Edward Teller, las personas percibimos el tiempo de dos formas: monocrónica y policrónica. En la primera encontramos que el tiempo se percibe de manera lineal, de forma que debe haber una organización para las actividades, realizando una a la vez y se da prioridad a los compromisos y negocios. En la forma policrónica el tiempo es percibido más como una oportunidad para realizar diversas actividades a la vez, saltando de una a otra, sin concluir alguna o terminando después de lo planeado. Aunque socialmente existan horas establecidas, son difícilmente tomadas en cuenta y los compromisos pasan a tener menor importancia.

Estos conceptos van más allá que la aplicación en un individuo. El dominio de estos tiempos se extiende a culturas y regiones completas. Encontramos que en los países del norte la mayoría son monocrónicos y los del sur son policrónicos. Esta policronía incluye, por supuesto, a América Latina y sin duda a México.

De manera social e inconsciente el ser una persona puntual se entiende como parte de alguien responsable, comprometido, que le da importancia y su lugar a la gente. Alguien impuntual es visto como irresponsable y ausente de educación, pues no respeta el tiempo ajeno haciendo esperar o no entregando en momentos acordados.

De manera social e inconsciente el ser una persona puntual se entiende como parte de alguien responsable.

¿Cómo nos gusta ser percibidos? Si platicamos con un extranjero nos damos cuenta que, tristemente, los mexicanos somos reconocidos por la impuntualidad.

Aun así, somos muchos los mexicanos puntuales y en nosotros está el cambiar ese reconocimiento. Sin importar nuestra actividad, profesión, género, gustos, y demás, la puntualidad es algo que puede llegar a definirnos pues se convierte en un valor, que ha llegado a ser requisito para conseguir trabajo, o conservarlo.

Como valor, por supuesto, se inculca en la familia desde que somos niños. Pero si no nos lo enseñaron y siempre vimos a nuestros padres correr para dejarnos en la escuela o para llegar al trabajo, en nosotros está el querer cambiar ese hábito. El saber que de nuestras acciones dependen las de alguien más nos debe permitir, en lugar de empoderarnos, crear empatía y responsabilidad hacia las personas con quienes tenemos el compromiso, que de inicio, somos nosotros mismos.

Aquí es donde entra la respuesta a qué hace este concepto en un artículo para creadores. Se tiene una idea que el artista trabaja en el momento que guste, cuando la inspiración llegue y las musas despierten. Pero no siempre puede ser así. Desde que nos estamos formando debemos cumplir con un horario para tomar las clases, con tiempos de entregas de tareas y proyectos. Posteriormente las entregas serán con clientes reales. Clientes que pagarán según lo acordado siempre y cuando se les haga una entrega profesional. Palabra clave. Ser puntual es parte de ser profesional.

Ser puntual es parte de ser profesional.

Hacernos conscientes de nuestra forma de percibir el tiempo no quiere decir que no hay remedio. Si te consideras policrónico tampoco es excusa para siempre llegar tarde. Al contrario, es una oportunidad para reflexionar sobre qué acciones puedes realizar para que tus proyectos salgan a su tiempo debido y no seas víctima de las presiones y del estrés que esta policronía genera. Comenzando por jerarquizar tus proyectos, tu vida social y personal.

Y si te consideras monocrónico, continúa así, recordando que siempre puede haber un equilibrio entre vida académica, profesional y personal y que una no excluye a la otra.

Una parte de nuestro Manifiesto en Artinside dice que nos honramos siendo puntuales. Somos creadores, somos artistas y lo somos llegando a tiempo, terminando a tiempo, entregando a tiempo.

 
 

«Nunca podría haber hecho lo que he hecho, sin los hábitos de puntualidad, orden y diligencia, sin la determinación de concentrar en mí un objetivo a la vez.»

Charles Dickens

 
 

Referencias:

  • Diccionario de la Lengua Española. Puntualidad. https://dle.rae.es/?id=UgUlROD Consultado el 04/04/2019

  • Manifiesto Artinside. Consultado el 25/01/2019 https://www.artinside.com.mx/manifiesto

  • Por qué algunas personas siempre llegan a tiempo y otras no. La vanguardia. Consultado el 29 /03/19 https://www.lavanguardia.com/vivo/psicologia/20160603/402260328411/personas-puntuale-personas-impuntuales.html

  • Psicología de la puntualidad. Consultado el 29/03/19 http://psicologiadelapuntualidad.blogspot.com

  • Thor Muller. Psichology Today. Is punctuality a virtue or a vice? https://www.psychologytoday.com/intl/blog/get-lucky/201206/is-punctuality-virtue-or-vice. Consultado el 04/04/2019


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